
Banda: AMORPHIS
Álbum: Borderland
Lanzamiento: 26 de septiembre de 2025
Sello: Reigning Phoenix Music
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Tres años han pasado desde la publicación de “Halo”, un disco que, sin ser malo ni mucho menos, no tuvo la recepción que seguro la banda esperaba. Un giro leve de timón en su sonido, añadiendo elementos un poco progresivos, que hacía que sus composiciones sonaran un algo más densas y no entraran a la primera y que tampoco fueran tan “enganchables” como veníamos siendo acostumbrados.
Claro que después de dos discos como “Queen of time” (para muchos el mejor disco de la banda) y “Under the red cloud” (otra locura de trabajo) el listón estaba demasiado alto y eso hizo que un gran trabajo como es “Halo”, no nos engañemos, supiera algo menos que sus dos antecesores.
La carrera de AMORPHIS ha pasado por varias etapas que no voy a mencionar ahora, pero la última de ellas comienza cuando entra a la banda Tomi Joutsen y se hace cargo de las voces (limpia y gutural).
Su primer disco “Eclipse” (2006) aún arrastra, como es lógico, algo de la anterior etapa, pero ya con el segundo, un año después “Silent waters”, la banda encuentra ese sonido que prácticamente no abandonarán hasta el día de hoy. La gran pregunta es la de siempre. ¿eso es bueno o malo? ¿es bueno mantener un estilo y a veces poner el “piloto automático” en caso de que el rumbo sea bueno (como es este caso) o es mejor que la banda evolucione o cambie?. La respuesta siempre dependerá de cada uno.
Para mí, las bandas deben evolucionar, lo hacemos todos en nuestra vida, tú no eres la misma persona ahora que hace 20 años. Pero esa evolución no debe perder la esencia de la banda…enseguida nos llega a la cabeza el ejemplo de Metallica. AMORPHIS ha evolucionado su sonido, han pasado de un death crudo con leves toques folk de sus inicios a un, como yo denomino, death elegante en la actualidad, algo parecido a la carrera que han tenido Dark Tranquillity. Pero ese cambio de los fineses no han traicionado la esencia de su sonido. Si escuchas el brutal “Tales from the thousand lakes” reconoces a AMORPHIS, pero si lo haces con esta nueva entrega, “Borderland” ese sonido “amorphisiano” sigue intacto en este disco.
Y es que “Borderland” es AMORPHISen estado puro. No copian a AMORPHIS, no plagian a AMORPHIS, es AMORPHIS. La banda, probablemente, fue consciente que “Halo” no era el camino que los fans esperábamos y han vuelto a la senda de los últimos trabajos más exitosos. Y de qué manera.
“Borderland es un discazo. Sus tres adelantos eran la mejor carta de presentación que podía tener este trabajo. Dos temazo como “Dancing shadow” y «Light and shadow” que nos devolvían a ese sonido, aparentemente sencillo, pero cargado de matices, y entre esos dos adelantos nos regalaban “Bones” un tema diez. Oscuro, con un toque a película de Serie B americana y un videoclip que lo complementaba perfectamente. Uno de los mejores temas de la carrera de AMORPHIS para este que escribe, que ya es decir.
Ante estas tres entregas la duda llega en el que nos podían ofrecer en el resto del disco. Pues más de lo mismo e incluso a veces mejor. El día de su publicación también sacaban a la luz su cuarto adelanto (a día de hoy no entiendo mucho eso de publicar un video lyric el mismo día de la salida de un disco cuando ya lo puedes escuchar completo en plataformas digitales). “Fog to fog” supera a alguno de los adelantos anteriores y hace que esas expectativas que teníamos con el trabajo aumentaran aún más.
Cualquier fan de AMORPHIS que espere un sonido continuista de “Queen of time”, “Under the red cloud”, “Silent waters” o, de mi favorito de la banda “Skyforger”, lo va a encontrar aquí. Desde los teclados, muy presentes durante todo el álbum, y que ya destacan en el magnifico abridor “The circle” pasando por esos maravillosos estribillos melódicos que inundan todas las canciones, como el de “The strange”, hasta cortes sublimes y más pausados como “The lantern” y ese estribillo con la voz gutural de Joutsen, hasta llegar al tema que da título al disco merecedor de serlo.
Caso aparte es el arte y la producción del álbum. La portada, creada por el neerlandés Marald van Haasteren, quien se estrena con AMORPHIS, continúa el legado de los álbumes con arte diseñado por Travis Smith haciendo una preciosa portada. En lo que respecta a la producción, otro que se estrena con la banda es el danés Jacob Hansen, involucrado en los últimos discos de bandas como Arch Enemy o Dynazty y que sustituye al productor de los últimos trabajos, el sueco Jens Bogren. Este cambio curiosamente no ha hecho que el sonido de la banda varíe a oídos de los mortales, manteniéndolo tal y como lo traían hasta ahora, lo que contribuye a que la esencia de AMORPHIS no se pierda nunca.
En definitiva, el silencio discográfico de estos tres años ha valido (y mucho) la pena. “Borderland” no será su mejor disco, pero definitivamente, sí estará en los primeros puestos de su discografía (cosa muy complicada cuando se han tenido tantísimos éxitos a lo largo de su carrera) y, con casi toda seguridad, en las listas de los mejores discos de este año en muchas revistas y webs especializadas. AMORPHIS sigue estando en plena forma y es una de las bandas más importantes de la actualidad después de 35 años de regalarnos clásicos del metal.
Salva Arteaga




