Aquí os dejamos la crónica de David Gonzalez con imágenes de Ana Carmona del paso de THE POODLES por Madrid…
THE POODLES
+ OVERLOUD + SEXPLOSION
Sala Rock Kitchen – 27 Abril 2013 – Madrid
El pasado sábado 27, nos dirigimos hacia la sala Rock Kitchen, una sala que toma dicho nombre cuando cambia la actividad a conciertos y que pasadas las once de la noche, se convierte en una discoteca de música muy diferente a la que pudimos ver en una gran tarde noche de hard rock. Aunque deberíamos referirnos solo a noche, ya que la apertura de puertas estaba estipulada a las siete de la tarde, pero por problemas técnicos, no pudieron abrir hasta las ocho. Lo que provoco algunas modificaciones durante el concierto que iremos contando a lo largo de esta crónica. Por otra parte, la sala durante gran parte de la noche, tuvo problemas de acoples de sonido muy incómodos, que afectó las actuaciones y por supuesto al publico que allí se reunió, que veíamos como nuestros oídos morían por momentos. Pero vamos a lo que nos atañe, que son estas pedazo de tres bandas que demostraron su buen hacer. Empezamos.
Los primeros en abrir la noche fueron Sexplosion. Cuando el público empezaba a entrar en la sala, la banda ya nos esperaba encima del escenario sin poder hacer una previa prueba de sonido y dadas las circunstancias, tuvieron que reducir el repertorio en cuatro temas. Aún así, dejaron un buen sabor de boca.
Los madrileños nos dejaron temas de su última obra “Powerful As Its Name” como “She’s ready to lick”, “Don’t tell me Who I am”, “Justified Agression” o “Afire”, con un desparpajo reseñable en todo momento.
En los escasos 20 minutos de su actuación, supieron demostrar una buena valía con una actitud inmejorable. Es una pena, sea el motivo que sea, que las bandas que les toca el duro, pero a la vez gratificante papel de abrir a las bandas que viene detrás, tengan que ver mermado su actuación por este tipo de circunstancias.
Overloud, fueron los encargados de dar buen legado de un buen hard rock siguiendo muy en la línea de sus antecesores. Después del primer tema,“Hell’s Getting Closer”, pidieron disculpas a los asistentes por haber retrasado la prueba de sonido en una hora.
Detrás de esto siguieron descargando temas de su álbum debut como “Lone Star Motel”, ya con un sonido más aceptable. La banda en general es puro nervio. Mientras ejecutan los temas, acompañan con movimientos y posturitas que hace que los asistentes se contagien de esa rabia y esa energía haciendo botar a la sala entera.
Aprovecharon muy bien los 50 minutos que estuvieron en el escenario, descargando temas como “Lone Star Motel”, “Homeless”, “Swallow my Love” o una genial “Born to Raise Hell”. Animaban al público cuando los temas así lo requerían para dar más contundencia a los mismos. Finalmente presentaron un tema de su próximo álbum “Don’t Wanna Let You Go” y se despidieron con una versión de Motley Crue, “Wild Side”.
Ambas propuestas van muy de la mano por el tipo de hard rock que practican. En cuanto a Sexplosion, necesito verles más tiempo encima de un escenario pero con lo que pudimos ver allí, suficiente para ver de que van estos tíos y la verdad a mí me quedo claro. Por otra parte, Overloud, pusieron toda la carne en el asador y demostraron lo que mejor saben hacer. Dos grupos, un estilo, pero cada uno con su toque personal que desde aquí recomiendo una escucha a estos tíos que seguro os harán vibrar, como nos hicieron vibrar a los presentes la noche del pasado sábado en Madrid. Sin duda, dos grandes propuestas nacionales de hard rock.
Llegamos al momento que todo estábamos esperando. A las 21:40 de la noche, The Poodles hacía aparición con el primer tema de su último disco hasta la fecha Performocracy, “I Want It All”. Había ganas de ver a estos chicos en el escenario y eso se notó. El público se volcó desde el principio cantando el tema con el grupo que cedía el micro para que cantásen los asistentes de las primeras filas.
Sin descanso descargaron un tema del primer disco que daba nombre al mismo “Metal Will Stand Tall”, que puso la sala patas arriba. A continuación “Cuts Like A Knife” también coreada por el público. Dieron un pequeño descanso ante tal empiece, con unas palabras de Jakob Samuel (Vocalista) en las que decía que, estaban muy contentos de estar otra vez en España y que les encanta la acogida del público, algo que siempre se agradece.
Como un buen seguidor de la banda desde sus comienzos, tuve la oportunidad de ver su primera actuación en España allá por el 2007, acompañando a Hammerfall y Krokus, en la que solo tocaron media hora y les tocaba ejercer de teloneros y lo que ello conlleva, y es que, por aquel entonces, estaban promocionando su música y aun no eran muy conocidos. En esta ocasión, tras unas visitas más a España, puedo decir, que es una banda que ha crecido y que ha calado dentro del público español. La diferencia entre lo vivido el pasado sábado y los últimos conciertos en la península dados anteriormente, son un claro ejemplo de que están creciendo poco a poco, pero creciendo al fin y al cabo y es que, The Poodles, se está ganando la simpatía del público español, sin duda.
Continuaron con “Thunderball” perteneciente al segundo álbum Sweet Trade, “I Believe in You” y la eurovisiva, “Line of Fire”, que la verdad fue una sorpresa que tocaran este tema, ya que no suele ser habitual en sus conciertos, pero a mí me parece un tema que arenga bien al respetable.
Un pequeño paron, esta vez para comentarnos que el 17 de mayo sale a la venta el próximo álbum de estudio “Tour the Force” y que tocarían el single esa noche, pero después de presentar mas temas de su ya amplia discografía. La sorpresa para los presentes, llegó cuando el guitarrista, Henrik, se arrancó a hablar castellano, haciendo un poco de intérprete de Jakob, no sin antes decir que tiene pendiente mejorar en el idioma para este tipo de ocasiones y que nos utilizará para practicarlo. Que decir, que se llevo el aplauso y los coros del público que agradeció tal gesta de valentía.
A continuación venia el momento tranquilo del concierto con el tema “Crying”, que daba ese toque romántico a la noche, ya que no habría más baladas durante todo el show. Esto desembocó en una especie de Jam entre Pontus (Bajista), Henrik (Guitarra) y Kicken (Bateria). Alrededor de cinco minutos tuvo este momento en el que dan descanso al vocalista, y ellos se pueden despachar a gusto demostrando la habilidad que tiene cada uno con su instrumento, teniendo cada uno su momento, como fue el caso del batería que, como no podía ser de otra manera, dirigió al publico a modo de golpes con su kit. Como anécdota, Kicken, sacó una cámara y grabo el momento desde su perspectiva.
Una vez terminado, volvieron a la carga con “Flesh and Blood” y “Too Much of Everything”. El primero más duro y el segundo algo más relajado, aunque igual de contundente. Jakob se mostró agradecido con el público español, alegando que lo que estaba pasando esa noche era inolvidable y nos daba las gracias por el apoyo que recibían, y que pronto los volveríamos a tener por aquí, concretamente en octubre, presentando la nueva gira con nuevo disco bajo el brazo.
Seguían descargando buenos temas tales como la pesada “I Rule the Night”, la coreable y siempre divertida “Like No Tomorrow” y “Seven Seas” con la que jugaron con el publico haciendo que coreasen de mil formas el mítico “Give it up”.
Con esto se despidieron una última vez pero para volver con los bises tras algunos cánticos del publico exigiendo su vuelta al escenario. En esta ocasión, cumplieron la promesa de tocar algo del nuevo disco llamada “40 Days And 40 Nights”. Al no conocer el tema, el público se dedico a escuchar y atreviéndose en ocasiones a cantar el estribillo, el cual era pegadizo. Buen tema, aunque tendremos que esperar a escucharlo tranquilamente, pero seguro que terminara siendo otro hit mas de estos suecos.
Y ahora sí que si, llega el final del concierto dando carpetazo con una de sus canciones más famosas y que les lanzo a la fama, gracias en parte, a que la presentaron a eurovisión. Estamos hablando del tema “Night of Passion”. Un tema de sobra conocido por los asistentes y que cantaron hasta quedarse afónicos. Tanto el público como la banda no querían que terminara y alargaron un poco más el tema.
Llegados al final del concierto, saludaron y después se acercaron al puesto de merchandising a firmar y hacerse fotos con todo aquel que se lo pidiera. Estuvieron geniales, tanto encima, como debajo del escenario. Sin duda una banda de 10 que se deja la piel en todos los aspectos que ello conlleva y que además, es de agradecer que cuiden de esta forma a los fans.
Y con esto damos, punto y final a esta noche de buen hard rock, con tres bandas recomendables. Si aun no las conoces, ¡no se a que esperas!
Redacción: David González
Fotografía: Ana Carmona