Artista: Juan Saurin
Álbum: Supremacy?
Sello: Maldito Records
Fecha: 18 de octubre de 2019
Nota: 8,5/10
Juan Saurin es uno de esos músicos que sin hacer mucho ruido ha ido labrando su camino, superándose a cada paso que ha ido dando hasta lograr ser un referente dentro del panorama nacional. Jefe del departamento del aula de música moderna de Yecla desde el año 2012 y habiendo asistido a masterclass de algunos de los mejores guitarristas del mundo (Steve Vai, Joe Bonamassa…), el guitarrista natural de Yecla nos presenta en este 2019 su cuarto lanzamiento discográfico bajo el título “Supremacy?”.
Un disco que lleva dentro una historia muy interesante al hablar de la supremacía que cree tener el ser humano. Así, según el propio guitarrista, los cuatro primeros cortes de este álbum (“Ex Nihilo”, “Greed and Fear”, “Change Nothing” y “Weak and Tired”) son una sola pieza, citamos textualmente: “Trata de expresar el momento en que el ser humano empieza a creerse un Dios”. Hay una segunda parte compuesta por los temas “Carpe Dying”, “The Last Call”, “Pure Love” y “Reality Check”, que de nuevo forma una sola pieza que; “Sugiere el inevitable camino de la autodestrucción de la civilización humana por dicha ambición”. Siendo el epílogo, “Nihil Fit”, “Una distopia de la desaparición de la civilización”.
El disco ha sido compuesto y producido en su totalidad por el propio Juan Saurin, que ha contado para el álbum con músicos tan reconocidos como Matt de Vallejo (batería), Andy C (bajos y batería) o Pepe Herrero (producción).
Una propuesta interesante sobre el papel que promete un disco repleto de grandes sonidos y melodías, y desde luego lo que presenta sobre el papel lo sabe llevar a la música con una maestría indiscutible. Cortes muy directos y potentes abren el disco, sirva como ejemplo “Change Nothing”, con una combinación de ritmos y una base rítmica plagada de potencia, que muestra una apuesta clara por un heavy metal melódico con la particularidad de que nos encontramos ante un álbum completamente instrumental. Una propuesta arriesgada e interesante, y que además está resuelta de una forma magistral.
Tenemos hueco para esos cortes algo más lentos, ligeramente más pesados (provocado por una base rítmica más lenta y pesada) pero que siguen siendo realmente deslumbrantes como es el caso de “Carpe Dying”, que resulta ser una pieza exquisita con unas melodías espectaculares y que logra que esa pesadez que decía antes sea una virtud, ya que le da ese toque particular al tema para que consiga transmitir lo que el músico desea transmitir.
En línea de este tipo de cortes más pausados en cuanto a ritmo se puede citar también “Weak and Tired”, un tema que sin ser tan pesado como el citado en el párrafo anterior también es algo más lento, sin embargo es curiosa esta progresión en ritmos más pausados, ya que en el tracklist del álbum “Weak and Tired” está antes de “Carpe Dying” y vemos como el ritmo va disminuyendo en favor de un sonido que sigue siendo muy contundente pero gana esa pesadez indicada previamente.
Siguiendo esta progresión indicada se encuentra uno de los temas que más me ha gustado del disco, donde todos los instrumentos ayudan a crear ese sonido denso que podemos escuchar pero donde va a destacar un bajo realmente sublime y una batería exquisita, “The Last Call” me ha parecido una obra maestra y ha sido el corte que más me ha gustado en un disco con un nivel muy alto, un disco instrumental que logra ese hito tan difícil que es conseguir que no se eche en falta un cantante o algún tema que incluya voces para romper la monotonía, ya que logra no ser monótono en absoluto y lo consigue en base a canciones como esta, con cambios de ritmo, incrementando en algunos pasajes concretos la agresividad de las guitarras y haciendo un juego de sonidos sencillamente sensacional.
También vamos a ver pasajes en este disco donde el músico maneja unos medios tempos excelentes como es el caso de “Pure Love”, con ese aire de balada exquisita y con unos solos que dejan claro por qué se está considerando ya a Juan Saurin como uno de los mejores guitarristas de este país, ya que el tema es una verdadera maravilla de principio a fin, destilando una calidad y una belleza que quedan fuera de toda duda y con unos solos de guitarra para enmarcar.
Rompe la tendencia de los últimos temas la llegada de “Reality Check”, sin renunciar a ese sonido más pesado el corte se llena de fuerza para romper esa dinámica de cortes que se acercan más a lo melódico, buscando unas atmósferas muy concretas, y volvemos a tener una canción que derrocha potencia a raudales, una buena forma de jugar con el sonido por parte del artista que nos deja claro que todo en este disco está estudiado al milímetro y creado con mucho mimo.
Las guitarras limpias de “Nihil Fit” son otro punto de vista de la propuesta de Juan Saurin, y una muestra más de la inmensa calidad que atesora en sus manos, logrando cerrar esta obra de una forma magistral con un corte que rompe por completo en el inicio con el sonido visto hasta ahora y en el que la entrada de la artillería pesada hace escalar enteros, siendo un broche de oro inmejorable para esta obra tan ambiciosa como exquisita.
A modo de bonus tracks vamos a poder disfrutar de los temas “Mar” y “Éxodo” en versiones sinfónicas, un regalo para disfrutarlo como se merece disfrutar el resto del álbum. Un disco que viene a confirmar al guitarrista como una realidad de presente y a mostrar que tiene un enorme futuro ante sí, con la calidad de las composiciones que vamos a poder apreciar en este álbum podemos tener claro que la ascensión de Juan Saurin no se va a detener aquí, que estamos ante su mejor disco hasta la fecha, de eso no me cabe duda, pero que hay aún mucha materia prima para dar discos que puedan superar a este “Supremacy”, lo que lo convierte en algo realmente prometedor.
Joseph Draven